Te comparto mi oración al repasar las luces que el Señor me
dio trabajando las Epístolas de Pablo, y que fueron publicadas
con el título: Jesús habla de Pablo.
Nos habla el Señor de Santidad-Pureza y Fraternidad.
Espero te sirvan.
Dios te bendiga, León
SANTIDAD Y PUREZA - Jesús, Hijo de Dios vivo, ¿Qué espera tu Padre Dios de parte nuestra? - ¡Esta es la Voluntad de Mi Padre Dios para vosotros: vuestra santificación! (Cfr. 1Ts 4,3) - Jesús, Hijo de Dios vivo, ¿qué nos recomiendas para nuestra santificación? - Que os abstengáis de la fornicación, que cada uno guarde su propio cuerpo santamente y con honor, sin dejarse dominar por la concupiscencia, como los hombres del mundo que no conocen a Dios (Cfr. 1Ts 4,3-5) - Jesús, Hijo de Dios vivo, ayúdanos a servirte con un cuerpo casto. - En este asunto, que nadie abuse de su cuerpo ni engañe a su hermano, pues Mi Padre Dios toma venganza de todas estas cosas impuras (Cfr. 1Ts 4,6) - Jesús, Hijo de Dios vivo, ayúdanos a ser santos de verdad. - Mi Padre Dios no os llamó a impureza, sino a la santidad (Cfr. 1Ts 4,7) - Jesús, Hijo de Dios vivo, ¿el que peca con una mujer peca contra Dios? - El que menosprecia el pecado contra la pureza y castidad, no menosprecia a un ser humano solamente, sino que menosprecia a Mi Padre Dios, que además os concede el don del Espíritu Santo en vuestros cuerpos (Cfr. 1Ts 4,8) - Jesús, Hijo de Dios vivo, te pido que nos concedas el don de fortaleza para resistir las tentaciones y el don de la templanza para dominar los impulsos de nuestro cuerpo. - Mi Padre Dios al concederos el don del Espíritu Santo en vuestras almas, os concede también todos sus dones. - Jesús, Hijo de Dios vivo, cada día debemos librar una dura batalla contra la maldad de satanás que nos tienta por la carne, ayúdanos. - ¡Te basta Mi gracia! Se fiel y vencerás. - Jesús, Hijo de Dios vivo, háblanos de la fraternidad. - En cuanto al amor fraterno, no tenéis necesidad de que os diga algo, pues vosotros mismos habéis sido instruidos por Mi Padre Dios para que os améis unos a otros, y en efecto, así lo estáis poniendo por obra. - Jesús, Hijo de Dios vivo, todo el que viene a tu Ciudad se siente amado. - Los demás podrán decir de vosotros: <mirad cómo se aman>. Todo esto es para la mayor gloria de Mi Padre Dios. - Jesús, Hijo de Dios vivo, ¿quieres agregarnos algo? - Pero os encarezco, hermanos, a que progreséis más y a que os esmeréis en vivir con serenidad (Cfr. 1Ts 4,11) - Jesús, Hijo de Dios vivo, serenidad es madurez, estabilidad de ánimo. - Serenidad es confianza en vuestro Padre Dios, Mi Padre Dios, que siempre os sacará de los apuros y peligros. - Jesús, Hijo de Dios vivo, Tú nos recomendaste a toda hora el no tener miedo. - Y Yo os digo ahora: ¡no tengáis miedo! - Jesús, Hijo de Dios vivo, ¿cuál es la causa del miedo? - El miedo lo produce el maligno satanás para tratar de acobardaros; pero si vosotros tenéis fe, nunca tendréis miedo. - Jesús, Hijo de Dios vivo, creo que también ayuda a tener serenidad el saber que podemos contar con el pan de cada día. - El pan de cada día lo tenéis asegurado, porque Mi Padre Dios, a los que trabajan para Él, como vosotros, se encarga de mandarles el sustento. - Jesús, Hijo de Dios vivo, creo que tu Padre Dios nos manda el trabajo para que así obtengamos el sustento. - Entre vosotros, el que no trabaje, que no coma. Es muy importante que cada uno de vosotros ame el trabajo que Mi Padre Dios le ha dado, y que cada uno lo realice con perfección. - Jesús, Hijo de Dios vivo, aunque estamos construyendo una Ciudad para todos los hombres de la tierra, hasta ahora no hemos recibido ayuda de la gente de fuera. - Yo construiré Mi Ciudad con el aporte generoso de Mi hijos de Mi Ciudad, de modo que no necesitéis de nadie más (Cfr. 1Ts 4, 12) - Jesús, Hijo de Dios vivo, pero son muchos los gastos que requiere la construcción de tu Ciudad y muy pocos son nuestros ingresos. - Poned vosotros los panes que tengáis y Yo Me encargaré del resto. - Jesús, Hijo de Dios vivo: ¡Gracias!